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La mayoría de nosotros ama la música. Somos provocados por ella, movidos por ella, nos conectamos a ella (y a los demás cuando tenemos gustos similares). Refleja nuestros instintos profundos acerca de quiénes somos y de nuestra experiencia en el mundo. No es sólo un conjunto de sonidos, es un lenguaje particular que nos permite entendernos mejor con el mundo y entender a los demás en términos prácticos. Por si no lo sabías, a través de los gustos musicales, YouTube puede configurar un buyer persona útil para SEO y SEM. Pero antes de hablarte de data, te contaremos acerca de la relación que existe entre la música y tus otros sentidos.

Si te preguntara acerca de tu banda, artista o género favorito, seguramente ya tendrías una (o varias) respuestas aseguradas de tantas veces que has escuchado la pregunta, la música es fundamental, es parte de nuestra personalidad. Nuestros gustos musicales se deben a la relación de esos artistas con nuestra vida: la nostalgia de la adolescencia, que haya sido el soundtrack de un momento difícil que luego superamos (o de un gran momento que no deseamos olvidar), que haya sido una canción que nos dedicaron alguna vez… Etcétera. La música tiene un fuerte vínculo con la memoria y determina rasgos de nuestra personalidad.

Mira cómo se relaciona e impacta la música a nuestros demás sentidos.

  • Vista: Tu reacción se hace más lenta cuando estás escuchando música a alto volumen y conduciendo al mismo tiempo. La música ocupa todos tus sentidos mientras que las direcciones para llegar a tu destino solo ocupan una pequeña parte del cerebro. Un estudio llevado a cabo por la Universidad Ben-Gurion de Negev encontró que “el tipo de música que escucha un conductor, al igual que el volumen al que la escucha, tiene un impacto significativo en la habilidad del conductor para conducir de manera segura.”
  • Gusto: Los distintos sonidos, o su volumen y ecualización, tienen múltiples formas de potenciar o anular tu experiencia gustativa. Es divertido cómo podemos escuchar música a través de todo lo que hacemos, incluso en la comida. Escucha tu comida, ella habla, comunica algo. Si no me crees, piensa en aquella vez que te sentiste medio excéntrico y decidiste tomar un té chai o algo así, extraño, la comida comunica cómo quieres verte, ella canta también.
  • Tacto: La música afecta nuestro tacto directamente: nos puede poner más sensibles o más agresivos. De hecho, es tal su impacto sobre el tacto, que puede tener un papel central en los atletas: cuando los jugadores de hockey están en el camerino, se usa música enérgica para motivarlos enérgicamente, mientras que las bailarinas de ballet usan música más suave que las haga entrar en armonía con su cuerpo.
  • Olfato: Ciertos aromas potencian la memoria. La música lo hace a través de la rima y el ritmo. Date cuenta cuando piensas que te resulta más fácil recordar la letra de una canción que lo que decía un examen; es porque la música tiene rima y ritmo. Además, hemos cargado a través del cine, el arte, la cultura y la publicidad; a los espacios de sonido: vallenato y cumbia en los asados, jazz en los ascensores, rock alternativo en los nuevos cafés…Ciertos aromas nos llevan a imaginarnos una música en particular. Incluso Drake, el popular rapero a nivel global, compone pensando en términos olfativos y piensa cómo podría sonar un aroma dependiendo de la época del año.

Como puedes ver, hay una intensa relación entre la música y los sentidos que puedes utilizar a tu favor a la hora de estructurar una estrategia en el futuro o tan sólo para tener en cuenta cuando vayas conduciendo. Como te dijimos en un principio, la música es más que un conjunto de sonidos: es la manifestación sonora de los sentidos, y varias marcas como Motorola, Renault, Volkswagen, Pepsi (entre otras), han sabido aprovechar esta reacción, como por ejemplo en el siguiente comercial de Renault Clio, donde podrás observar la historia de un mesero que mantiene su ánimo arriba, tarareando un sonido constantemente. A determinada hora del día, decide salir a esperar un auto que pasa a toda velocidad dejando el mismo sonido que el hombre repetía una y otra vez, al final nos damos cuenta que se trataba de “Get on up”, famosa canción de James Brown que estoy seguro que la has escuchado en algún momento de tu vida en la radio o quizás gracias a este comercial.

De la misma manera, Pepsi, la famosa marca de bebidas gaseosas conocida también por sus altos presupuestos para sus comerciales, tras reunir a los mejores futbolistas en los 2000´s; pasó a reunir a varios de los músicos más famosos de la pasada década para generar publicidades impactantes que calaran en los sentidos y emociones de sus consumidores. En esta oportunidad a través de un ritmo básico de rock, podemos observar cómo la música puede influir en el estado de ánimo y actitud de las personas; en una historia donde al mejor estilo de un Coliseo Romano, un grupo de gladiadores deciden dejar salir a flote su coraje y adrenalina, para rebelarse frente al César y acompañados por el público, lograr generar energía suficiente para hacer temblar el lugar y liberarse tomando la bebida.

Esto sólo es una pequeña muestra de lo que puede lograr la música en tu cuerpo y tus sentidos, una marca que sepa aprovechar las características puede aumentar sus niveles de recordación a través de jingles, cuñas o comerciales. Si te gustó este artículo no dudes en compartirlo y leer también “4 maneras en que la música influye en tu cuerpo” para ampliar tus sentidos y conocer más sobre este maravilloso tema.

 

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